A estas alturas todos ya lo saben, pero ayer, 16 de mayo a las 7:45 de la mañana se apagó una de las luces más brillantes del metal, Ronnie James Dio.El cancer es algo terrible, cuando crees que lo estas venciendo este regresa con fuerzas renovadas y normalmente gana la batalla. Aunque personalmente tenía una mala sensación desde que Ronnie informó que estaba enfermo, mantuve la esperanza (junto con todos sus fans) de que vencería al dragón y regresaría a lo que más le gusta: cantar.
No pudo terminar su nuevo proyecto musical, Heaven and Hell, que acabó con un primer y último album de estudio; y las letras escritas de su nuevo album, Magica II, ya nunca serán grabadas.
Nunca lo conocí en persona (y vaya que me habría gustado verlo en vivo), pero se veía que era un gran sujeto, que realmente quería y apreciaba a sus seguidores, y no se las daba de diva (como muchas otras pseudo-celebridades, que como son famosos creen que pueden caminar sobre quienes les dan de comer).
Queda su musica para la historia y para el inolvidable recuerdo de quienes disfrutaron con ella.
Hasta siempre Ronnie, leyenda del metal, ojalá y en este momento estes rockeando en el cielo junto a otras personalidades de la música en general. Si Michael Jackson te ofrece una manzana, ten cuidado, te lo dice un fan que lo ha pasado (y seguirá pasandolo) genial con tus discos.
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